¡El Messi de Boris!

Como la gran mayoría de ustedes, queridos lectores, saben, terminé las prácticas en el Diario La Rioja el pasado domingo 14 de septiembre. Sin embargo, aunque necesitaba descansar, lo echo de menos.
Ayer pasé por allí a entregarle a Boris, el mejor guardia de seguridad de España y parte del extranjero sin menospreciar a Pepiño ni a George, la tarjeta con la que abro la puerta.
- ¿Y tú qué haces aquí? ¿No te habías ido ya?- fue el recibimiento que me hizo Boris.
- Sí, vengo a devolverte la tarjeta- respondí yo con tranquilidad.
Aproveché que tenía que ir al médico para devolver lo que no era mío y despedirme de una de las personas que más me han sorprendido en el periódico: Amable, cercano, buena gente...pero merengón.
Por eso aprecio tanto el muñequito que me regaló la semana pasada, un Messi de unos 13 centímetros de longitud de los 'Barça Toons'. Parecido al 'Otto' que utilizaban los de Zona Cuatro en la Eurocopa para hacer budú a los rivales de la Selección Española. El propio Boris me dijo que tenía dos opciones: quemarlo o regalármelo a mí, finalmente, y tras un ataque de cordura, optó por la segunda.
Lo cierto es que Messi subió conmigo a la redacción. Por suerte estaba rodeada de gente de bien, gente del Barça. A mi derecha Toño, culé de los de toda la vida, (es decir, anti-madridista de los de toda la vida, que igual tampoco es del Barça), en frente Esti -o no se enteró de nada o pasa del fútbol- a la izquierda de Esti Martín -que como Messi es argentino le da igual arre que so-, detrás Jorge -culé hasta la médula- y junto a él Nuria -otra que tal baila-.
Messi anduvo de mesa en mesa por la redacción aquella mañana. En vista del éxito decidí llevarlo también a la tarde, sabiendo el riesgo que podía conllevar el cambiarme de sitio.
Isabel no sé si se enteró o no de las andanzas de mi Messi, pero no hubiera habido problema, también es culé. Como Casimiro no andaba por allí el peligro casi se había esfuamdo -es yo creo el más merengue que hay en todo el periódico-. No quise cruzar hasta deportes, me advirtieron de que en talleres había mucho merengue, y aquello queda demasiado cerca de deportes. Además, en dicha sección simpatizan demasiado con el equipo blanco.
Todo el día estuvo Messi de arriba para abajo. Algunos se reían del muñeco en cuestión. Y es que Messi gana mucho como muñeco, gana mucho siendo un 'Barça Toon'. Había que mirarle la camiseta para saber qué jugador era. Yo no tenía dudas, era 'El Messi de Boris'.
Todo iba perfectamente hasta que de repente un infiltrado de deportes, Pablo Álvarez, interceptó a mi pequeñín. Lo agarró de la pantalla del ordenador, sobre la cual yo misma lo había conseguido sentar tras mucho esfuerzo y equilibrio, y de ahí fue directo a una papelera. Menos mal que tuve reflejos y lo rescaté a tiempo de otra sacudida.
El martes vi el partido con Messi junto a mí. Lo cierto es que no nos fue tan mal, tras el susto del nefasto arranque liguero, ya que ganamos 3-1 y la diferencia pudo ser bastante más amplia. Ahora hay que arrancar en Liga. Suerte que contamos con gente tan válida y curranta como Puyol, Iniesta o Xavi, internacionales con la Absoluta, o Messi, Márquez, Alves, Keita...
Quizá Boris no sea consciente aún de la importancia de su regalo. Quizá ese muñeco se convierta en un talismán...